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domingo, 6 de noviembre de 2016

El dueño del pitbull lo usaba para amedrentar en el barrio



En la casa donde habitaba el perro de raza pitbull que atacó e hirió a una familia había otros dos más. Vecinos, que prefirieron no identificarse, revelaron que dos jóvenes, los dueños de los animales, los sacaban y utilizaban para amedrentar a los vecinos, y se divertían al ver cómo peleaban y mataban a otros perros callejeros.

El juez Fernando Rivadeneira envió a prisión preventiva a un joven que él mismo identificó como Jesús. La directora de Animales SOS, Susana Carpio, y vecinos de la zona donde el feriado del 2 de noviembre el perro pitbull atacó e hirió a tres personas, entre ellas a una mujer embarazada y posteriormente fue atacado a machetazos por uno de ellos, lo que derivó en su muerte, revelaron que ya había una alerta del vecindario sobre el peligro de los tres animales.
“Dos jóvenes viven en esa casa, y se dedicaban a pasear a los animales por la zona, amedrentar a los vecinos para sembrar miedo, y se divertían enfrentando a sus mascotas con otros perros callejeros, que acababan muertos”, señaló la activista Carpio.

Vecinos, que prefirieron no identificarse, señalaron que en al menos tres ocasiones en el último año se quejaron a la Alcaldía de La Paz, pero que en todos los casos la Perrera Municipal pidió que se haga una denuncia formal.
“No lo hicimos porque la familia propietaria de los perros es demasiado conflictiva, nos iban a identificar, y eso iba a repercutir en problemas para nosotros”, manifestó uno de los vecinos afectados.

El juez Rivadeneira apresó a Jesús, señalando en la audiencia cautelar como elemento principal para sustentar su decisión, que el perro agresor no estaba registrado como estipula la Ley de Tenencia de Animales Peligrosos, promulgada en 2014. El peligro que acecha cuando estos perros no tienen cuidados especiales o permanecen encadenados es enorme.

El 4 de marzo, una mujer de 37 años murió tras ser atacada por tres perros de raza pitbull y uno mestizo en Cochabamba. El ataque ocurrió cuando María Luz Molle Gómez lavaba ropa para los propietarios de los canes y los dueños de casa la dejaron sola.

Otro caso que conmocionó ocurrió en El Alto el 20 de mayo de 2013, cuando dos perros de raza rottweiler atacaron a la niña Rosalía Apaza, que entonces tenía cuatro años.

Los animales le causaron enormes daños en la cabeza. La historia conmovió a Claudia Tolay, quien, junto con su esposo, Joseph Courrier, llegó a Bolivia para trasladarla al Children’s Hospital de Boston (Estados Unidos). La pequeña no regresó a Bolivia, sigue con tratamiento fuera del país. Se supo que el ataque le causó epilepsia y otros trastornos


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