Amadog pretende impulsar, dice Acosta, "un hito social en el que las personas entendamos algo que es sumamente importante: que los perros son canes y no humanos, que su psicología es canina y no humana y que para que el ser humano pueda convivir con ellos en armonía, lo primero es satisfacer las necesidades reales del perro”.
Hace cuatro años, esta comunicadora social de profesión, comenzó su servicio de paseo a perros en el barrio de Achumani, en la zona Sur de la ciudad de La Paz, donde hasta hoy funciona.
Hubo una época en que expandió su empresa a Irpavi y Los Pinos; sin embargo, no logró contar con el apoyo comprometido de gente que trabaje con ella, por lo cual se le hizo imposible atender a todos los clientes de forma correcta.
"Entrenadores hay muchos, pero lo que yo busco es que mi empresa enseñe a la gente lo que realmente necesita el perro; por lo tanto, necesito trabajar con personas que además quieran capacitarse constantemente”, explica la empresaria.
Desde 2012, Acosta se dedicó a autoformarse de manera constante a través de internet, libros y videos; así aprendió y sigue aprendiendo cada día sobre los pormenores de las razas caninas.
A los paseos se sumó el de alojamiento, como una respuesta a las necesidades de sus clientes cuando debían realizar un viaje de trabajo o de vacaciones y no podían llevar a su mascota.
Con el crecimiento del negocio y la convicción de Acosta sobre la seriedad del servicio que ofrece llegaron más iniciativas. El tercer servicio en surgir fue el de capacitaciones para dueños de perros, "porque no se trata de sólo sacar al perro a pasear tres veces al día por cinco minutos para que no ensucie el jardín; es como tener un hijo, eso significa aprender estimulación, trabajar un poquito más para ganar más para sus pastillas, para su comida, etcétera”.
Las capacitaciones consisten en tres horas de taller en el domicilio de los amos y, si desean, seguimiento a los avances del liderazgo de los dueños. Otro servicio surgió luego de que la emprendedora tomó cursos y se tituló en manejo de terapia Reiki, la cual ahora es una de las herramientas más útiles que emplea para bajar la ansiedad de los canes. "Lo lindo con los perros es que no son como los humanos, que tenemos miles de cosas dentro de la cabeza, sino que son acción, reacción y estímulo. Entonces el resultado es súper bonito, bastante visible y con cambio de actitud rápidos”, asegura Acosta.
Los cuatro servicios hacen de Amadog, como lo dice su nombre, una morada de cuidado integral para perritos.
Los paseos tienen un costo de 30 bolivianos por hora y 35 por hora y media; un día de alojamiento cuesta entre 45 y 75 bolivianos (dependiendo del tamaño y situación del can).
Hoy su empresa da paseos en grupo e incluso servicio de góndola para recoger a los animales y llevarlos a lugares más abiertos. Además, pronto implementará musicoterapia y alimentación orgánica. Amadog atiende en los teléfonos 76762611 y 2710114.
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