Los perros son animales divertidos, pero si no te hacen caso, también pueden ser muy frustrantes. Aquí encontrarás un par de órdenes que serán fáciles de aprender para tu perro y, en consecuencia, te harán la vida mucho más fácil. Ten en cuenta que estas órdenes sugieren el uso de comida (golosinas) como recompensas, pero una mejor recompensa serán los elogios que recibirá después de cada orden que obedezca. Es también una manera de crear un lazo especial con él y lo incentivará a obedecer sólo por la atención.
La orden de sentarse
Consigue algunas de las golosinas favoritas de tu perro, cualesquiera que sean. Esto ayudará a captar la atención de tu mascota y que te escuche. Será de más ayuda si la golosina es muy pequeña. No le des recompensas que tu perro no pueda masticar ya que esto le enseñará agresividad.
Sostén una golosina de forma que tu perro pueda olerla, pero no comerla.
Con la golosina agarrada firmemente, justo encima de su nariz, dile en un tono claro "siéntate".
La primera vez que se lo digas, necesitas "mostrarle" lo que tiene que hacer. Dale un pequeño empujón en el área de su cadera (no la espalda) hacia el suelo con una palma firme presionando suavemente, mientras tiras de la correa o de la parte inferior del collar.
Cuando finalmente se siente, dile "¡buen/a chico/chica!" y recompénsalo con la golosina. Es muy importante que no repitas la palabra "siéntate". Da la orden una vez y luego haz que se cumpla. Regañarle no servirá de nada.
Repite estos pasos hasta que el perro comience a asociar el hecho de obedecer la orden con obtener la golosina y el elogio. Una vez que el perro esté a gusto con el truco, con el tiempo deja de darle golosinas.
Haz que tu perro se siente, siempre y cuando hayas tenido éxito con las instrucciones anteriores. Si no lo lograste, hacer que tu perro se tumbe será un desafío aún más difícil.
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