Usar tonos oscuros, luz puntual y profundidad de campo a la hora de tomarlas crean una atmósfera envolvente y logran retratar, si se utiliza un buen ángulo, los rasgos más fuertes de quien esté de modelo.
¿Y es lo mismo si el modelo es un animal? Fotógrafos de primer nivel como Annie Leibovitz y Richard Avedon usaron en sus grandes producciones de moda a animales como elefantes, gansos, monos, gatos, caballos, entre tantos otros, para darle a sus imágenes ese toque necesario, para que destaque, para que sean diferentes, pues un animal puede expresar, a veces, mucho más que un ser humano.
Daniel Uria y Juan Pablo Behoteguy, dos fotógrafos paceños que radican en Santa Cruz, tenían muy claro todo eso y ahora, siguiendo una tendencia mundial, instalan un estudio especializado para complacer a los amantes de los animales.
My pet photo
Daniel y Juan Pablo se conocieron especializándose en fotografía, ambos son activistas por los derechos de los animales, y un tiempo después de haberlo charlado, el proyecto lo ejecutaron y con mucho éxito.
La fotografía de mascotas trata de darle un lugar especial a ese miembro de la familia que no es humano, pero que ha robado el corazón de toda la familia, ya sea por sus patas peludas o su encanto al jugar. Quienes amen a las mascotas estarán de acuerdo que muchas veces es el rey de la casa y como tal merece una fotografía apropiada.
Estos emprendedores prefieren ir a las casas de las mascotas para que puedan estar más a gusto en su ambiente, utilizan juguetes o diferentes técnicas para tranquilizarlos o hacerlos jugar y capturar ese segundo en el que su esencia sale resplandeciendo, mostrando la personalidad del animal.
Los costos son variados, la intención es que sea accesible para todos aquellos que aman a sus mascotas, sean de la raza que sean. Hay que amar y conocer a los animales para saber cómo tomar estos retratos
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