“Hasta ahora tenemos 120 animales que provienen de los 15 albergues para damnificados”, aseguró el director de esa unidad, Gonzalo Uscamaita.
Varios niños que fueron evacuados hasta las viviendas prefabricadas de Bajo San Isidro dijeron que extrañan a sus mascotas, pero que van a visitarlas cuando pueden.
El propósito de que los animales hayan sido apartados de los albergues es para evitar la propagación de alguna enfermedad.
La Unidad de Zoonosis también está controlando la fecha de expiración de los alimentos que son donados y además pretende evitar la presencia de roedores en los albergues. (MP)
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