Los rusos están muy acostumbrados a verlos, y ni siquiera se dan cuenta de lo extraño que puede sonar para un extranjero la idea de un perro que viaja en el metro. En Moscú hay cerca de 35 mil perros callejeros, y como todos los animales de este estilo buscan los sitios donde conseguir fácilmente la comida y protegerse del frío. De todas maneras, solamente 500 de estos perros han aprendido a usar el metro.
LOS PELIGROS
DE LA CIUDAD
En un ambiente hostil como puede ser una multitud en el metro, los perros callejeros saben cómo comportarse, algo que los domesticados no podrían hacer. El metro es casi un laberinto, pero ellos lo conocen de memoria.
En un comienzo, los perros llegaron gracias a quienes cuidaban el metro y los mismos conductores, quienes les daban de comer y los cuidaban. Los perros actuales buscan no solo un lugar cálido, sino el trato con los humanos, quienes en muchos casos juegan con ellos y les dan cariño. Incluso algunos viajan en el metro por recreación y no solo por recorrer distancias largas.
INTELIGENCIA ANIMAL
Estos perros son un ejemplo de lo que se ha llamado inteligencia animal, que puede verse en varias especies que desarrollan razonamiento y pensamiento consciente, algo que se considera propio de los humanos. Conviviendo con las personas, han aprendido a tomar ventaja de los inventos y desarrollos tecnológicos, sobreviviendo a través de ellos.
Han aprendido también a seguir las leyes del tráfico, y estudiar las repeticiones de las acciones para no cometer ninguna falta. Además, predicen los comportamientos humanos: si necesitan comida envían al más atractivo de la manada para que le den su comida sin problemas.
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