Los afectados indicaron que aparentemente desde la oficina de Zoonosis municipal se estaría procediendo a la eliminación de canes sin previo aviso, hecho que da lugar a que también se elimine a perros que tienen dueños y cuyos animales estarían circunstancialmente en la calle.
Al respecto otras personas, defensores de la eliminación de canes que viven en las calles, justificaron esta acción indicando que si los canes tienen dueños, deberían estar dentro de las casas y no así en las calles en el horario nocturno.
No obstante los vecinos afectados señalaron que los perros salen por un par de minutos en las noches, exponiéndose al riesgo de ser envenenados.
Sin tener éxito en lograr una entrevista con Zoonosis municipal, se consultó a Animales SOS, quienes destacaron por un lado que cada vecino debe ser responsable de su mascota y por otro señalaron que los riesgos colaterales al envenenamiento con estricnina.
“Evidentemente cada dueño de mascota debe preocuparse por ella, no se trata de adoptarla y echarla a la calle. Sin embargo para envenenar a los perros se está usando la estricnina que a parte de causar una agonía prolongada en los animales es también un riesgo para las personas, por que no necesariamente los bocados con este veneno son limpiados del lugar donde fueron depositados”, indicaron.
Situaciones como esta evidencian el grado de incumplimiento de la Ordenanza Municipal Nº 036/2000 vigente en nuestro municipio.
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