TENER MASCOTAS EN CASA OTORGA GRANDES Y VERDADEROS BENEFICIOS | SIN EMBARGO, NO ES UNA DECISIÓN QUE SE DEBA TOMAR A LA LIGERA, LOS PADRES DEBEN ENSEÑAR A LOS NIÑOS QUE NO SE TRATA DE UN JUGUETE.
Muchas familias tienen una o más mascotas en casa y es que suele suceder que los más pequeños del hogar insisten en tener una. Si bien es cierto que convivir con una mascota ofrece muchos beneficios para los niños, hay aspectos muy importantes que se deben tomar en cuenta a la hora de tomar esta decisión. Los adultos, que son los padres en este caso, deben ser quiénes potencien estos beneficios y guíen en esta convivencia. Todos los miembros de una familia deben respetar al animal y se deben responsabilizar de su cuidado y las atenciones que requiere.
En cuanto a los beneficios que trae consigo respecto a la convivencia con una mascota, se han realizado muchos estudios. En los 80, el National Institute of Health, investigó sobre este tema y en 1987 publicó sobre la: “Salud y beneficios de los animales de compañía”. Actualmente existen más estudios que confirman los beneficios que otorga la tenencia de una mascota en el hogar. De hecho, en las últimas investigaciones sobre los vínculos entre los seres humanos y los animales, los terapeutas coinciden en que las mascotas proporcionan inesperados beneficios psicológicos para los niños más allá de lo obvio.
La convivencia con mascotas trae consigo aspectos muy positivos en el desarrollo psicológico y la personalidad del niño.
SOBRE LOS VERDADEROS BENEFICIOS
Psicólogos de la Universidad de Oregon, realizaron una investigación con niños en edad pre-escolar para observar la correlación entre el cuidado de mascotas y el aprendizaje de habilidades sociales. Este estudio mostró que tener una mascota mejora la capacidad de los niños para asumir roles distintos y que aumenta sus capacidades sociales para el futuro y además hace que los niños cooperen más y participen más.
Asimismo este estudió demostró que se afianza la empatía y la paciencia, ya que los niños aprenden a ponerse en el lugar del animal y a tratar de sentir cómo su mascota se siente. Esta empatía luego será aplicada hacia las relaciones con otros niños y con otras personas.
Por otro lado, se ha comprobado y contrariamente a los que se creía, que cuando se tiene una mascota en casa, los niños tienen menos probabilidades de desarrollar enfermedades respiratorias. Según un estudio, los microbios dentro del polvo asociado a casas con perros pueden colonizar el tracto gastrointestinal, modular una respuesta inmune y proteger al anfitrión contra el patógeno asmagénico VRS.
Pero los beneficios para la salud son más ya que también ayuda disminuir el stress y a que los niños sean menos agresivos, pero un punto relevante es que incrementa la actividad física, así que es una forma de que los hijos olviden, por lo menos a momentos, la televisión y los dispositivos y pasen tiempo cuidando y atendiendo a su cachorro. Entonces también se evita de alguna forma el sedentarismo.
Por otro lado, fomenta el amor en familia, ya que crea un vínculo más fuerte entre hermanos, sobre todo si cada uno tiene una tarea específica, pero también es una forma de aprender a trabajar en equipo y por tanto se aprende a compartir.
Otro de los mayores beneficios de tener una mascota es que disminuye la soledad, de alguna manera se vuelven en la mejor compañía y son un gran apoyo en los momentos de tristeza, además traen consigo diversión y este es uno de los puntos más innegable. Las mascotas regalan diversión a diario.
Además de los beneficios ya descritos, la lista continúa y es por ello que actualmente se utilizan animales en la fisioterapia infantil y en otros tipos de terapias para niños con capacidades especiales.
RESPONSABILIDAD COMPARTIDA
Otro aspecto fundamental es la responsabilidad que implica tener una mascota. Como ya se mencionó es importante que toda la familia asuma esta tarea con responsabilidad.
• Responsabilidad: Tener una mascota no significa solo juegos y mimos, también es cuidado, alimentación, limpieza. Es fundamental que todos estos aspectos los practiquen todos los miembros del hogar. Suele suceder que quienes se hacen cargo de todos son los papás, pero lo aconsejable es que los mismos niños aprendan y se les haga rutina cuidar de su mascota, ello a la larga les ayudará a ser más responsable con todo y a aprender a que se tienen obligaciones porque tener una mascota implica mantener, atender y tener en buen estado a su cachorro.
• Control: Los niños que tienen mascotas muestran un mayor control de sus impulsos.
• Habilidades sociales: Se ha comprobado que ayuda en gran medida en este sentido.
• Responsabilidad “compartida”: En cuanto a este aspecto es fundamental que si bien todos deben asumir con responsabilidad el tener una animalito en casa, tampoco se trata de que toda la responsabilidad recaiga sobre el o los niños del hogar, en realidad quien debe asegurarse de que la mascota esté bien cuidada, feliz y saludable, son los padres, pero de alguna manera asignando tareas a todos los miembros del hogar.
• Respeto: Todos los miembros de la familia deben saber que no se puede molestar a la mascota mientras come o duerme.
A LA HORA DE ELEGIR UNA MASCOTA
Para dar este paso se debe pensar bien. No actúe por impulso porque se deben tomar cuenta ciertos aspectos como tomar en cuenta el espacio y el tiempo disponible para la mascota, y los recursos económicos de los que se dispone para criar y atender a la mascota.
En función de estos factores podrá escoger primero el tamaño de la mascota, después el temperamento y luego el animal y la raza que reúna las características deseadas.
En síntesis, si bien el tener una mascota de manera responsable, promueve enormemente el desarrollo físico, emocional, cognitivo, espiritual y social de los niños, sí debe hacerse de forma muy responsable.
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