"Mi sueño era organizar sesiones de terapia animal en prisión, porque es el lugar donde hay menos cariño y donde los perros pueden aportar tranquilidad, un vínculo emocional y contacto físico”, explicó a la AFP Valeria Gallinotti, de 47 años, fundadora de la asociación Dogs Inside.
Presos condenados por asesinatos y violaciones rodean a los animales, los cubren de besos y abrazos y les lanzan incansablemente pelotas de tenis y balones de fútbol en el patio de cemento de esta prisión, situada cerca de Milán, corriendo con ellos sin preocuparse de la lluvia.
Desde marzo, acude voluntariamente una tarde por semana y se reúne con el mismo grupo compuesto de una docena de presos. Gallinotti les enseña a adiestrar a los perros, como dar la pata o acostarse, y les da también algunas enseñanzas básicas de terapia con animales para que sigan a su salida de prisión.
"Siempre amé los animales. Tenía un gato y un perro en casa, y la terapia fue formidable”, explicó Nazareno Caporali, de 53 años, condenado a cadena perpetua por asesinatos.
"Espero que un día podamos proponer a otra persona lo que hemos recibido, haciendo Pet therapy con enfermos de Alzheimer o niños con problemas psicológicos”, añadió el reo, mientras el labrador Titti, exhausto, se durmió a su lado. Maurizio, de 36 años -condenado por ordenar cinco asesinatos mafiosos y que en teoría sólo podrá salir en 2087, aunque espera pasar 30 años en prisión- pasó por 15 cárceles diferentes. Según él, la cárcel de Bollate es "de lejos la más avanzada por las oportunidades de recrearse”.
Las prisiones italianas están entre las más superpobladas de Europa y un 78 por ciento de sus presos son reincidentes. En Bollate, esta tasa cayó al 20 por ciento. La prisión ofrece cursos para ser cocinero, electricista o carpintero pero también cursos de pintura, yoga o jardinería.
Para acceder a ellos, los prisioneros tienen que aceptar algunas condiciones, como convivir con reos condenados por delitos o crímenes sexuales, que normalmente viven separados del resto
Pet therapy
Cualidades La idea de utilizar a animales es para favorecer la socialización y la relajación de las personas; esta idea se remonta al siglo XVIII y se desarrolló desde entonces.
En Bollate Los perros ayudan también a combatir la soledad de las celdas, debido a que brindan una compañía amistosa, pues los canes no se enojan, juegan mucho y escuchan atentamente.
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