La información corresponde a la Dirección de Zoonosis de la Alcaldía de Cochabamba, cuyas medidas que asume para controlar los canes están provocando conflictos con la Asociación de Defensa de los Animales (ADA).
La anterior semana se declaró alerta sanitaria a nivel departamental, después de que un niño de nueve años y un adolescente de 13 fallecieran con posibles síntomas de rabia humana luego de haber sido mordidos por sus mascotas.
Tras esas muertes también se informó sobre la existencia de 17 casos de rabia animal, pues esa cantidad de mascotas (incluidos gatos y monos) fue infectada por este virus.
La directora de ADA, Liliana Tellez, explicó que “la perrera elimina 50 perros al día y eso es demasiado”, y dijo que “han esperado (la Alcaldía) a que se den los casos de rabia humana para iniciar una campaña de recoger a los animales de las calles para eliminarlos (…) y estamos haciendo una denuncia internacional por este tema”.
En tanto, el responsable de la Dirección de Zoonosis, Gustavo Rosas, dijo que las cifras que denuncia Tellez son incorrectas pues aseguró que en su entidad tienen 18 celdas y en cada una cabe un perro.
“Es una falacia, una mentira que esa cantidad (50 perros por día) exista”, reclamó el funcionario.
Las normas
Rosas explicó que el proceso de recolección de los perros en la calle esta normado por la ordenanza 2223/98, en la que se establece que “el Centro de Zoonosis a través del carro-perrera debe recoger los animales de los puestos de basura, centros de abasto y la vía pública para ser conducidos al centro, donde se hace una clasificación de los viejos y enfermos y los que tienen buen estado de salud.
Al cabo de las 72 horas, si no son recogidos por sus dueños o adoptados, se procede a la eutanasia”. Es decir que los canes son eliminados.
Rosas sostuvo que las instituciones protectoras de animales no brindan apoyo en el proceso de dar en adopción a los animales que se encuentran dentro de la perrera.
La directora de ADA dijo que en la perrera recogen y eliminan los perros que tienen cintas de vacunación. “No hay veterinarios en la perrera. Hay un solo veterinario y los demás son empíricos”.
La sugerencia que hizo ADA fue promover la esterilización de las hembras para evitar que los animales en la calle continúen reproduciéndose y llenando las calles de más perros vagabundos que sean transmisores del virus de la rabia.
Preocupa aumento de casos
En los primeros tres meses de 2010 no se registró caso alguno de rabia canina, mientras que en ese lapso en la gestión 2011 los casos llegaron a 17. Este incremento provocó la declaración de la alerta sanitaria a nivel departamental.
El exresponsable del Programa de Control de la Rabia del Sedes Teddy Peñafiel, dijo que se requieren de 100 mil a 150 mil dosis de vacuna para cubrir los focos de vacunación en lugares estratégicos de la ciudad. “Pero en cualquier momento en el Servicio Departamental de Salud o de manera particular las personas pueden hacer vacunar a sus animales, no esperar el inicio de la campaña. Ahora, si una persona sufre la mordedura de un perro callejero o desconocido, inmediatamente debe asistir a un centro de salud para hacer seguimiento del caso”, dijo Peñafiel. A pesar de que la situación exige una inmediata campaña de vacunación, el Sedes anunció que la campaña programada para el domingo 24 de abril se suspendió y quedará postergada probablemente hasta mayo.
“Estamos convocando a una reunión con carácter de emergencia de todo el comité para poder determinar las acciones inmediatas que vamos a tomar. Pedir a toda la población que no tenga a los perros en la calle, estamos ante una contaminación alarmante por la circulación del virus de la rabia”, aseguró.
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