Con relación a este tema la representante de SOS, Susana del Carpio, dijo que no se puede ignorar la comercialización indiscriminada de animales silvestres, vengan de donde vengan. “La única manera es publicar y denunciar a la página y mostrar a la gente lo que hacen algunas personas inescrupulosas que se dedican a esta actividad”.
Recomendó a la ciudadanía que no compren estos animales que no son igual que una mascota, como los perros y gatos; “hay animales que una persona no los puede tener en la casa, porque un domicilio no es el hábitat apropiado para ellos”, indicó.
“Para criar un animal exótico hay que tener el doble de la paciencia y el tiempo que no siempre se tiene, muchas veces cuando se logra tener un animal de estas características es solo para que muera”, dijo.
En este sentido, señaló que se tomarán acciones oportunas sobre todo destinadas a contrarrestar la venta de animales por internet, “pensamos difundir la página, vamos a hacer su denuncia respectiva para que la gente no compre nada a través de ese sitio, al igual que lo hicimos al denunciar a un circo, donde se evidenció crueldad con los animales”, afirmó.
“Cuando uno compra un animal de estas características es cómplice de estas acciones, muchas veces crueles, por las características del hecho. Esta gente trae o vende estos animales aprovechando la rareza o novedad de los mismos, sin embargo, es necesario que nos eduquemos para actuar con responsabilidad sobre este tema, razón por la que haremos una campaña de concientización en ese sentido”, dijo.
Existen tres tipos de animales, los domésticos que deberían ser protegidos por las alcaldías de cada departamento y la Constitución Política del Estado (CPE); los animales silvestres que deben estar protegidos por la Ley 1333, el Capítulo de la Biodiversidad de la CPE y el Código Penal de Bolivia.
“Están también los animales exóticos o silvestres, como son los erizos africanos, pero en Bolivia son exóticos, porque no son de nuestro país”, aseveró.
Por su parte el Ministerio de Medio Ambiente y Agua en el marco de sus competencias sobre el tráfico de animales de la fauna silvestre de Bolivia, realiza acciones para proteger, conservar y restaurar, en particular a las especies endémicas amenazadas y en peligro de extinción.
En este sentido, ante una denuncia sobre la venta de fauna, la Dirección General de Biodiversidad y Áreas Protegidas (Dgbap) se encarga de verificar la autenticidad de la misma, una vez que la denuncia es corroborada se inicia el proceso de recuperación de los animales y los infractores son llevados ante las autoridades competentes.
Los delitos tipificados son de orden público y serán procesados por la justicia ordinaria con sujeción al Código Penal y al Código de Procedimiento Penal.
El Viceministerio de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambios Climáticos y de Gestión y Desarrollo Forestal se constituye en parte querellante apoyándose en la Ley de Medio Ambiente Nº 1333 que en los artículos 110 y 111 especifican una pena de hasta 2 años de privación de libertad y una multa equivalente al 100% del valor de la especie.
En el año 2013 se han ejecutado 39 derivaciones de animales en peligro de extinción a centros de custodia. Es así que en marzo del presente año se recuperaron 8 mil insectos disecados que iban a ser comercializados de manera ilegal.
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