Ocurre comúnmente que nuestras mascotas, sobre todo si son perros o gatos, se pierdan. Esto puede suceder si van solos por la calle, sin ir atados, o les dejamos la puerta abierta de casa para que entren y salgan a su aire. Aunque no nos guste pensar en todas las opciones posibles debemos tenerlas siempre en mente. Y es que nuestras mascotas forman parte de nuestra familia y desconocer su parecido puede ser una gran tristeza para nosotros.
Si un día no encontramos a nuestra mascota de repente puede que se haya ido muy lejos y no sepa cómo volver a casa, puede que alguien la haya encontrado, pensando que estaba perdida o para quedársela, o bien, que haya sufrido algún accidente o haya fallecido. En el caso de los perros y los gatos cuando los adquirimos, los veterinarios suelen recomendarnos ponerles un identificador en la piel del cuello para poder localizarlos en caso de pérdida.
Si nuestras mascotas llevan este identificador podemos notificar que se encuentran perdidas.
PEGA CARTELES PARA PODER ENCONTRAR A TU MASCOTA PERDIDA
No obstante, puede que la gente no sepa que ese perro o gato que se pasea por el barrio está perdido o pertenece a otra persona. Por eso, es conveniente, si se quiere, colgar carteles con la fotografía de nuestras mascotas y el nombre por el cual responden por la zona. Sobre todo en los parques y en las partes donde más perros y gatos se concentren en el área donde vivimos. Al ver la fotografía con nuestro número de teléfono si alguien encuentra a nuestra mascota es muy probable que nos llamen para notificárnoslo y el traerla de nuevo a casa sería uno de los momentos más felices de nuestras vidas.
Lamentablemente, en muchas ocasiones los animales se pierden y nunca más se los vuelve a encontrar.
Existen mafias que roban a perros para venderlos. Otras personas pueden llevarse a un perro o gato que les guste sin pensar en el daño que podrían estar haciendo en toda una familia. Si éste es nuestro caso y nunca más volvemos a saber de nuestra mascota, tenemos que pensar que no ha sido nuestra culpa. A veces pasan cosas las cuales no podemos controlar y hay mucha gente en el mundo que no piensa en los daños colaterales que puede estar generando con sus acciones.
Sabemos que hemos querido a nuestros animales y que le hemos dado lo mejor y no debemos sentirnos tristes por su pérdida. Puede que algún día nos den la buena noticia de que la han encontrado, o bien decidamos adquirir un nuevo perro o gato. Al tener la experiencia con otros animales de compañía habremos aprendido a que debemos tener más cuidado con dejarlos sueltos fuera de casa y bajo supervisión para evitar perderles de nuestro lado y de nuestra familia.
SEPARACIÓN POR MUERTE
Muchas familias acaban perdiendo su mascota tras su muerte. Algunas de ellas viven largos años, pero otras enferman o tienen un accidente y se separan antes. Es normal que el vínculo creado entre los miembros de la familia y el perro o gato sean muy fuertes, por eso la muerte de nuestro animal de compañía puede llegar a afectarnos en gran medida.
Son muchos los años y los buenos momentos que hemos compartido junto a nuestro perro o gato. Sin embargo, debemos ser conscientes de que, como las personas, ellos tampoco viven para siempre y que el tiempo que hemos pasado juntos lo hemos disfrutado al máximo. Como bien sabemos los perros y los gatos se contentan con poco, simplemente con un poco de atención, cariño y afecto ya son felices. Por eso, el vacío que dejan en nosotros es grande, porque nos regalan lo mismo pero en cantidades mucho más altas.
RECUERDA A TU PERRO CON CARIÑO
No debemos sentirnos tristes durante mucho tiempo, puesto que a nuestra mascota no le haría feliz que lo estuviésemos. Una buena manera de sobrellevar la situación es adquiriendo una mascota nueva con el tiempo, eso no quiere decir que el nuevo perro o gato haga que tu familia se olvide del anterior animal de compañía, pero si nos ayudará a olvidarnos.
Los animales nos recuerdan constantemente que debemos vivir en el pasado y que debemos dejar de estar melancólicos. Por eso, una nueva mascota nos podría ayudar a tener ese amor incondicional que nos daba también el perro o gato que nos ha dejado. Puede que decidamos no adquirir una mascota nueva, si eso es así, debemos tener un bonito recuerdo del animal de compañía que nos ha dejado, pero recordar que debemos seguir siendo tan felices como cuando estaba él con nosotros.
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