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jueves, 14 de junio de 2012

Los canes son principales transmisores de la rabia

Los canes, en todo el mundo, son los principales transmisores de la rabia, que es una enfermedad causada por un virus conocido por Rhabdoviridae. Este mal es contagioso no sólo para los animales, sino también para las personas y el resultado es la muerte.

Por ello, en recientes días las autoridades de salud del país organizaron una campaña de vacunación antirrábica, con la finalidad de prevenir y precautelar la integridad de las personas, sin embargo, quienes tenemos a estos animalitos domésticos en nuestras casas no entendemos, que no solo de cariño viven los canes y gatos, sino de cuidados, principalmente de salud y alimentación.

Los resultados registrados el día de la campaña llaman la atención, porque apenas se superó la mitad de la meta programada de 70 mil canes vacunados en la ciudad de Oruro, llegando sólo a 45 mil.

Esa situación fue por la dejadez de los ciudadanos, no en todos, pero los datos son fríos. Ante esa situación, las autoridades del Servicio Departamental de Salud (Sedes) determinaron ampliar la campaña por una semana más, es decir, hasta el domingo 17 de junio en todos los centros de salud.

¿Qué pasaría si nuestras mascotas tendrían rabia?, veamos qué es esta enfermedad y sus características. Como ya dijimos al principio, los perros son los transmisores principales de la enfermedad en el mundo.

La rabia canina se transmite a través de la saliva de un animal contaminado. Por lo general esto ocurre mediante una mordida. Se sabe que el virus de la rabia no dura mucho fuera de un cuerpo con vida, puede permanecer activo en carcasas de animales hasta 24 horas, pero no más.

SÍNTOMAS

Los síntomas de rabia en perros suelen aparecer entre tres y ocho semanas después del contagio. Sin embargo, hay casos de incubación más largos, de hasta seis meses. En los humanos, los síntomas suelen aparecer entre tres y seis semanas tras la infección, pero hay casos de incubación más larga.

Existen tres fases, la primera es la prodrómica, se caracteriza por conductas aprehensivas, nerviosismo, ansiedad y aislamiento voluntario del can, son agresivos y cambian de dóciles a amigables. Esta fase dura dos a tres días.

La segunda fase se denomina furiosa, no siempre se presenta, pero cuando lo hace el animal es irritable e hipersensible a estímulos visuales y auditivos, no descansa con frecuencia y parece estar activo, muerde todo lo que se le pone en el camino, se muestran desorientados, llegan a tener convulsiones y mueren. Esta fase dura entre uno y siete días.

La tercera fase es la paralítica, no se presenta en todos los casos. Puede aparecer después de las fases anteriores. Sus síntomas incluyen la parálisis de los músculos de la cabeza y cuello, no puede tragar saliva. La mandíbula inferior se paraliza dejando la boca abierta, hace pensar al dueño que su perro tiene algo atorado en la garganta, afecta al diafragma y el perro muere.

El diagnóstico de rabia se hace en base a un análisis del tejido nervioso del cerebro, por lo que es necesario matar al perro para saber si tiene rabia o no.

PREVENCIÓN

No existe ningún tratamiento para la rabia una vez que se presentaron los síntomas. En estos casos, el individuo afectado está condenado a la muerte. Sin embargo, existen vacunas efectivas para prevenir la enfermedad. Todos los perros deben ser vacunados contra la rabia aún cuando son cachorros. La vacunación debe ser periódica. Toda persona mordida por un perro u otro animal, debe lavar bien la herida con abundante agua y jabón, y dirigirse a un centro de salud. La persona que fue mordida recibirá una serie de vacunas antes que se presenten los síntomas. Si los síntomas ya están presentes, entonces no hay nada que hacer.

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