‘Alvin’ solo sobrevivió cuatro días. “Alvin”, el pequeño perrito de dos meses, fue comprado el pasado 28 de julio por Juan Carlos en 550 bolivianos en el conocido centro de venta de canes, ubicado en la avenida Tres Pasos al Frente.
Según la denuncia, el animal estaba en buenas condiciones de salud; se mostraba activo, con buen estado anímico, jugaba y se alimentaba con normalidad pero luego de dos días su salud ingresó en crisis, ya que no quería comer, jugar, ni tomar agua y el miércoles pasado quedó paralizado hasta que falleció, afectado por el virus de la rabia, la madrugada del jueves pese al tratamiento especial que le brindó el veterinario Luis Ernesto Antelo.
Catorce personas en tratamiento por temor. Las personas que estuvieron en contacto con ‘Alvin’, entre ellos los siete miembros de la familia de Juan Carlos y los veterinarios que lo atendieron se encuentran actualmente recibiendo las respectivas dosis de prevención contra el virus de la rabia. En total tienen que recibir catorce vacunas.
Mercado negro de perros, bomba de tiempo. “El mercado negro de venta de perros se ha convertido en una bomba de tiempo”, señaló ayer Nicolás Gandarillas, responsable de Zoonosis, haciendo énfasis en la falta de conciencia por la compra de canes de lugares que no ofrecen ninguna garantía.
El Consejo Técnico de Zoonosis se reunirá mañana en el Colegio Veterinario desde las 9 de la mañana para tratar este tema y otros que se encuentran pendientes.
Detalles
Angustia e indignación en la familia
Más control. Los familiares de Juan Carlos, propietario de ‘Alvin’ se sienten angustiados e indignados de solo pensar que compraron una mascota como compañía y que de pronto ahora se enfrentan al riesgo de un virus peligroso, caso que podría ocurrir en muchas familias que compran negligentemente un canino sin tener las garantías de salud. El veterinario Ernesto Antelo aconseja realizar un monitoreo de virus en el “mercado negro de perros”.
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