Rocky. Con ese nombre bautizaron a un jucumari (Tremarctos ornatus) cuando llegó al zoológico de Santa Cruz hace 34 años, época de Noel Kempff Mercado. Ayer, Rocky y su guardafauna, Otto Muñoz, que es el encargado de su alimentación y de su cuidado desde que este ejemplar llegó al zoo, fueron homenajeados en el marco de los 34 años que conmemoró el zoológico. “Este jucumari está en el zoológico desde que el centro abrió sus puertas”, dijo el director, Mario Escalante.
Se deleitó con una torta
A las 9:00, en vez de su acostumbrado desayuno de quinua cocida y miel, o camotes, Rocky recibió una torta que devoró frente al personal de este centro que alberga algunas especies de la diversa fauna que posee el país.
Muñoz comentó que fue designado por el profesor Kempff para cuidar a Rocky, labor que nunca había realizado. Pero esto no lo desanimó, pues había sido criado en el campo. Fue así que asumió el desafío de cuidar al oso. “Hay una afinidad entre los dos; me huele cuando llego y hago sonar la llave al abrir la reja de su jaula para darle de comer”, apuntó y aseguró que en todos estos años el oso nunca lo ha atacado, aunque admite que hay que tener cuidado cuando el oso está en celo o con hambre. En una ocasión otro guardafauna tuvo que alimentarlo y Rocky intentó atacarlo, pero no pasó a mayores, porque el hombre se hizo el muerto.
Todos quieren que Rocky tenga descendientes, pero eso se ve poco probable puesto que esta especie de oso no supera los 35 años de vida. “Su pareja se llama María, ojalá pudiera darnos una cría”, dijo Escalante.
Crece el zoo
El zoológico ha crecido en los últimos años. De 20 especies registradas al inicio hoy cuenta con 275, además ha ampliado sus ambientes. Cada año recibe 256.000 visitantes que pagan el ingreso y 50.000 que entran de forma gratuita
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