Una perra frustra robo en la casa de sus amos

Tweet Su nombre es Blanca y hace más de un año que vive y resguarda a una familia en el barrio 18 de Marzo, de la Villa 1ro de Mayo.

Este fin de semana, la perra de raza criolla se convirtió en la heroína de sus amos al enfrentarse cuerpo a cuerpo contra un delincuente armado, que en el afán de escapar del interior de una vivienda donde pretendía robar ropa tendida le clavó un cuchillo de sierra en el lomo derecho del animal dejándolo malherido.

“Escuchamos el quejido de dolor del animal que vino a refugiarse a la sala. Ya cuando salimos, una persona salía corriendo de la reja en dirección a la avenida”, contó un familiar que prefirió reserva de su identidad.

Dejaron la puerta abierta. Todo se desencadenó a las 20:30. La familia afectada dejó por descuido la puerta del garaje de la casa semiabierta y la perra amarrada a un horcón de cemento. El sospechoso, que minutos antes había sido visto merodeando la vivienda, notó que nadie se encontraba en la sala, se armó de valor e ingresó rápidamente a levantarse la ropa que se encontraba secando en el colgador del garaje.

La actitud desconocida del ladrón despertó la furia del animal que ladraba incansablemente alertando que un extraño se encontraba en el interior sin obtener hasta ese momento, la atención de sus amos que platicaban en la parte trasera del inmueble.

Blanca, desesperada porque alguien la escuche, logró soltarse y atacó al sospechoso cayendo ambos al suelo. El delincuente, que se vio reducido por el animal que lo mordisqueaba en el suelo, sacó un cuchillo y se lo clavó en el lomo para después salir huyendo de la vivienda siendo posteriormente atrapado a tres cuadras del lugar donde vecinos le propinaron una golpiza antes de entregarle a la Policía.

Tuvo que ser intervenida. La familia afectada cuenta que para fortuna de Blanca, que por el dolor se llegó a desvanecer, un veterinario que a esa hora cruzaba casualmente por el lugar, logró asistirla médicamente ante la imposibilidad de que sus amos puedan sacarle el cuchillo que tenía incrustado en su lomo.

“El veterinario tuvo que sedarla para extraer el cuchillo. Pensamos que le había lastimado sus pulmones porque cuando intentamos sacarlo estaba bastante duro”, contó la familiar.

Lo singular del caso es que los afectados desistieron de denunciar al ladrón porque la Policía les comunicó que debían internar en un hospital al sospechoso y repararle un diente que le tumbaron los vecinos en la golpiza.