Dos nuevas especies woodlizard se han descubierto en zonas poco exploradas de la selva peruana. Los machos tienen hermosa coloración del cuerpo con un color verde característico antes de un marrón oscuro y el fondo negro. Se supone que las dos especies comparten el mismo territorio, con sólo una ligera diferencia en rangos de altitud, lo que hace su divergencia biológica interesante desde un punto de vista evolutivo. El estudio fue publicado en la revista de acceso libre ZooKeys.
“Estas especies fueron descubiertas en expediciones recientes a áreas pobremente exploradas en ambos lados de los Andes, tanto en Ecuador como en Perú, sugiriendo que más especies pueden estar esperando sus descubrimientos en otras zonas no exploradas cerca de los Andes”, escriben los investigadores.
Los científicos nombraron a una de las nuevas especies Enyalioides azulae o lagartija azul de los bosques, por la Cordillera Azul. La otra fue llamada Enyalioides binzayedi, o la lagartija de los bosques de Bin Zayed, en honor a Sheikh Mohamed bin Zayed Al Nahyan, Príncipe Heredero de Abu Dhabi y Subcomandante Supremo de los Emiratos Árabes Unidos, quien ayudó a financiar la expedición a través del Mohamed bin Zayed Species Conservation Fund.
La lagartija Enyalioides Binzayedi, presenta crestas enormes cual dinosaurio -si se tiene en consideración su tamaño- que podrían darle una apariencia intimidante, sin embargo son animales muy asustadizos y delicados.
Este curioso reptil recién fue descubierto en el 2009 durante una expedición comandada por el herpetólogo del Centro de Ornitología y Biodiversidad (Corbidi) Pablo Venegas y que tenía como objeto de estudio las ranas arlequín, especie que además se encuentra en peligro de extinción.
El hallazgo fortuito de este dinosaurio en miniatura, los llevó a descubrir otra especie de la misma familia pero mucho más colorida y de cresta más pequeña, la misma que fue bautizada como Enyalioides Azulae, en clara referencia al lugar donde fue descubierta. Esta variedad sólo se conoce de una sola localidad en la selva de montaña del Río Huallaga, cuenca amazónica en el noreste de Perú.
“Parece un dragón, sus crestas vistosas lo hacen medio aterrador, pero son animales muy frágiles y temerosos” afirma Pablo Venegas.
Especies endémicas
Estas dos especies únicamente han sido encontradas en la Cordillera Azul, por lo que se cree que su hábitat, al estar en un parque nacional protegido, está a salvo.
Comen cucarachas y grillos que encuentran en el suelo del bosque.
En el día son casi imperceptibles. Suelen esconderse en sus madrigueras cuando ven algún peligro.
En la noche, cuando duermen, se abrazan a las ramas de los árboles.
Los colores vistosos les ayudan a camuflarse bajo ciertas condiciones.
El paraíso amazónico peruano
Aunque hay sólo diez lagartijas de los bosques conocidas a lo ancho del mundo, una sorprendente cantidad de nueve de ellas pueden ser encontradas en Perú.
“Gracias a estos descubrimientos, Perú se vuelve el país que sostiene la mayor diversidad de lagartijas de los bosques. El Parque Nacional Cordillera Azul es un genuino tesoro para Perú y tiene que ser tratado como una preciosa fuente para la exploración y preservación futura”, expresó el autor líder del grupo investigador, Pablo Venegas, del Centro de Ornitología y Biodiversidad (Corbidi) en Lima, Perú.
El Parque Nacional Cordillera Azul se extiende tanto en las tierras bajas de la selva Amazónica como en los bosques de niebla en la cresta más oriental del Amazonas. Un estudio en el 2002 encontró 58 anfibios y 26 reptiles en una porción del parque.
No hay datos todavía respecto a si estas lagartijas de los bosques deben ser consideradas amenazadas o no. Actualmente ninguna lagartija de los bosques ha sido evaluada por la Lista Roja de la IUCN, la autoridad mundial en el estado de peligro de las especies.
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