RAREZAS PARA MASCOTAS EN COCHABAMBA ¡Qué vida de perros...!

Tweet Atrás quedaron los días cuando el perro de la familia debía permanecer en el patio, dentro de su casa y mejor si es la parte más alejada del jardín.

Ahora muchos canes tienen su propia cama de felpa dentro de la casa, otros con “más suerte” comparten la cama de su dueño o están a los pies del colchón de sus amos; y, aunque la mayoría todavía no tienen esa costumbre algunos celebran su cumpleaños, con invitados perrunos y todo, y claro que reciben regalos y muchos mimos en ese día especial.

Algo que parecía sólo una excentricidad de las estrellas de Hollywood, hoy en día se convierte en una actividad casi cotidiana en algunas familias. Es innegable que esta tendencia surgió en Estados Unidos y poco a poco se fue expandiendo al resto del mundo.

Esta globalización de tendencias está generando una nueva industria con buenas perspectivas, la de servicios y venta de objetos para el uso de las mascotas.

Así lo demuestra la aparición de hoteles para mascotas en todas las grandes capitales mundiales y en los desti- nos turísticos más exclusivos.

El objetivo de estos establecimientos es tratar a estas mascotas de un modo exclusivo, cumpliendo con los requerimientos más excéntricos de los dueños.

América Latina no quedó indiferente a esta tendencia y Bolivia no es la excepción. Sin mirar muy lejos, la ciudad de Cochabamba está viviendo un boom con la aparición de negocios destinados a la atención de mascotas. Cada uno está diversificando su oferta para gozar de la preferencia de los propietarios.

En diferentes zonas de la ciudad, desde el sector este del estadio Félix Capriles hasta barrios residenciales, comienzan a aparecer las tiendas de ropa y accesorios caninos, gimnasios y hasta hoteles de residencia temporal, sin dejar de mencionar los servicios de peluquería y veterinaria.

PERROS PRIVILEGIADOS

El ritmo de vida actual se ha vuelto cada vez más frenético y la jornada laboral más larga. Esta forma de vida ha hecho que algunos propietarios, con buena solvencia económica, puedan entregar a sus preciadas mascotas a profesionales que los acompañen y atiendan; y que además tengan la posibilidad de conceder y tratar a cuerpo de rey a su mimoso.

Pero, no todas las mascotas tuvieron la suerte de ser adoptados por gente con estas características, en Cochabamba existe un número limitado de propietarios de canes que pueden darse este lujo, ya que gastan un aproximado mensual de 150 a 600 bolivianos en peluquería, gimnasio, ropa, comida, snack o golosinas; sin hablar del costo adicional si se presenta un viaje temporal, pues a ello se debe sumar el costo del hospedaje temporal, más o menos un promedio de 50 bolivianos por día.

GIMNASIO DE MASCOTAS

“Sofi” de raza pequinesa, con cuatro años de edad, es la “hija” de Violeta Fiorilo, quien todos los días se encarga de vestirla y mimarla como una modelo canina de gran estirpe; además de llevar estricto control de sus actividades, entre ellos del gimnasio. Al cual acude tres veces por semana, por la tarde.

Apenas suenan las campanas de la puerta de la veterinaria “Can y Cat”, Sofi o “damita”, como la llaman en este establecimiento, sabe que le toca una sección un poco agitada. Mónica Blanco, propietaria de la veterinaria ubicada en la calle 16 de Julio casi Venezuela, la recibe en la puerta y la guía por los pasillos hasta el segundo nivel, donde sus compañeros ya la esperan.

Es un cuarto de unos cuatro por cuatro metros, pintado de colores intensos, decorado con huellas, como para darle un toque más especial. En el mueble de la pared está apilada una serie de juguetes y peluches; de frente en el otro rincón está una caminadora de ejercicios y una bolsa de pelotas pequeñas.

Aquí las mascotas son evaluadas constantemente, tanto su peso como su comportamiento; puesto que su ritmo de vida dentro los departamentos o casas sin patio han generado poca actividad en ellos.

“El perrito viene con un diagnóstico del veterinario, en algunos casos se trata de problemas de sobrepeso, stress y otros que -por el contrario- necesitan subir de peso. Es en base a estas observaciones que se desarrolla un programa de actividades físicas, terapéu- ticas o de juego”, afirma Blanco.

Aunque la veterinaria también se encarga de trabajar con las mascotas que requieren de fisioterapia para recuperar la movilidad de una parte del cuerpo, cuando han tenido accidentes”, asegura Blanco.

En otros casos los pacientes sólo necesitan liberar la energía acumulada. “Actualmente los perros son hiperactivos o se estresan y por eso algunas mascotas son dañinas o tienen problemas para alimentarse”, asegura Mónica Blanco.

Mónica Grájeda, estudiante y practicante de la veterinaria, es la encargada de establecer las rutinas y tiempos que cada mascota requiere en la caminadora, “ellos tienen que acostumbrarse a la máquina, luego se incrementa poco a poco la velocidad; al finalizar algunos cachorros cumplen su tratamiento para engordar y se les ofrece una galleta”, asegura Grájeda.

El costo de este servicio es de 20 bolivianos por día, según el tamaño del can y lo ideal es tres sesiones por semana. Por su parte, Violeta Fiorilo, propietaria de Sofi, asegura que su “hija” va al gimnasio no sólo para bajar de peso, sino que le sirve como un espacio para socializar y generar amistades, ya que en casa es la única mascota.

residencia temporal

Aunque no son hoteles de cinco estrellas como existen en otros países, en Cochabamba también se encuentra una serie de hoteles para mascotas, que brindan atención esmerada a los cachorros del hogar. Rocío Ponce de León, propietaria de la veterinaria Aranjuez, ubicada en la avenida Eudoro Galindo 1749, ofrece los servicios de hotelería desde hace cuatro años y comenta que las fechas de mayor cantidad de clientes es durante las fiestas de fin de año y vacaciones de invierno.

“Aquí el animalito es tratado con si estuviera con sus amos, recibe los mimos y cuidados”, asegura Ponce de León.

Carol Perpich, gerente técnica de la veterinaria, afirma que tienen el cuidado de separar a los alojados por sexos y que la parte más complicada del cuidado, en mascotas primerizas, son los primeros días porque la mascota sufre y extraña a sus amos; pero una vez que se acostumbra esta feliz.

Entre los servicios que ofrece se encuentra la alimentación, el baño y el corte de pelo, cuando el alojamiento excede los 10 días y el costo es de 50 bolivianos por día, cuando el cachorro es mediano o chico.

En algunos casos también se provee de un handler (instructor) para salir del hotel, porque generalmente los cachorros permanecen en el hotel, la premisa es mandar al can con mejor aspecto del que llegaron al hotel.

Cada diez días el perro es bañado y en casos de requerirlo se ofrece la peluquería, “la forma de consentirlos y tratarlos es personalizada, incluso algunas mascotas deben dormir acompañadas de un humano, -ese servicio también se presta-, es que son canes muy “humanizados”, por lo tanto consentidos, por eso sus dueños invierten en un trato muy preferencial y además que ellos estén seguros de que su mimoso recibe el mismo trato que en casa.

Moda perruna, una alternativa

Rropa, accesorios y camas

“Happy Woof” pet boutique

Ésta es una de las tiendas más visitadas por los propietarios de perros, que ya tienen la costumbre de vestirse para

salir.

“Abrí la tienda porque yo no encontraba ropa especial para mi pequinés, así como había en Estados Unidos”, asegura su propietaria Violeta Fiorilo, cuya tienda se ubica en la avenida Villarroel esquina Juan Capriles.

Es así cómo empezó a importar ropa para canes, de diseños exclusivos y a la vanguardia.

La tienda ofrece una amplia variedad de tallas y diseños, incluso de disfraces, y una gama delicada de bisutería canina para las perritas y también collares, corbatas para los machos.

“Por ahora es un mercado pequeño, no hay una amplia aceptación, aunque tengo clientes que vienen a comprarles su ropita de temporada”, señala Violeta.

Y por lo general los objetos más solicitados son los overoles, deportivos y algunos trajes de etiqueta.

Asimismo, Fiorilo desea lanzar su propia línea de ropa “tengo muchos diseños en mente que quiero hacerlos realidad, es difícil pero es una meta a cumplir”, finaliza Fiorilo.